La Nevera!
- Ajuste el termostato del frigorífico.Si su termostato está ajustado para que haga más frío del necesario, su frigorífico puede estar consumiendo hasta un 25% más de energía de la necesaria. Para obtener los mejores resultados, el frigorífico debe ajustarse dentro del intervalo de 2,5 a 4,5 grados, y el congelador entre -18 y -15 grados . .
- Limpie los serpentines.Los serpentines del condensador dirigen el flujo de aire en el frigorífico, y a menudo se encuentran detrás o debajo del frigorífico. Estos serpentines a menudo se cubren de polvo y suciedad, lo que restringe el flujo de aire frío y obliga a la unidad a trabajar más de lo necesario.
- Utiliza una cubitera. Por muy cómodos que sean los fabricadores automáticos de hielo, los mecanismos que utilizan son unos devoradores de energía.
- Vigile la formación de escarcha en el congelador. Si la escarcha es de 1cm o más gruesa, es hora de descongelar y deshacerse de ella. Toda esa escarcha está haciendo que tu electrodoméstico trabaje más de lo necesario.
- Mantenga la puerta cerrada. Abrir la puerta del frigorífico y mirar los alimentos es una forma segura de dejar salir aire frío y entrar aire caliente. La unidad tiene que trabajar para reemplazar el aire frío. Decide lo que quieres antes de abrir la puerta, o intenta minimizar el número de veces que lo haces; cuando prepares una comida, simplemente coge todos los ingredientes que necesites, de una vez.
- Horno
- Olvide el precalentamiento.
- Aunque la mayoría de las recetas sugieren precalentar el horno, muchos cocineros están de acuerdo en que es innecesario para todas las recetas excepto unas pocas, a saber, panes y pasteles. Esto puede añadir algunos minutos al tiempo total de cocción, pero elimina el (a veces largo) tiempo de espera mientras se precalienta el horno.
- Elija el quemador adecuado para la sartén. Un quemador pequeño tardará mucho más en calentar una sartén grande que una pequeña. Su cocina trabajará más de lo necesario, consumiendo más energía de la necesaria. Seleccionar el quemador del tamaño adecuado para la sartén que va a utilizar puede ayudarle a reducir su factura de energía en unos pocos dólares al mes.
- Corte la corriente antes de tiempo.Los elementos de la cocina pueden seguir muy calientes durante minutos después de haber sido apagados. Apague el quemador varios minutos antes de que finalice el tiempo de cocción y deje que el calor residual haga su trabajo. La misma técnica puede aplicarse al horno. Seguir estas prácticas puede suponer un ahorro de unos cuantos euros al mes.
- Mantén la puerta cerrada. Mantenga la puerta del horno cerrada mientras cocina para que la temperatura se mantenga constante. Cada vez que abra la puerta del horno, la temperatura puede bajar hasta 24°C. Asegúrese también de que la puerta del horno cierra herméticamente.
- Hervido energéticamente eficiente. Utilice un ajuste de calor alto para hervir líquidos en la estufa, luego reduzca el calor para mantener un hervor bajo constante.
- Los recipientes de cristal se calientan mejor. Utilice recipientes de cristal para hornear para una mejor transferencia del calor.
- Esto no hace falta decirlo. No utilice el horno para calentar la cocina.
- Utiliza pequeños electrodomésticos para pequeños trabajos. Utiliza aparatos pequeños (como un horno microondas) para cocinar o recalentar pequeñas cantidades de comida. Consumirás hasta un 50% menos de energía que con un horno convencional.
Lavavajillas
- Gestione la carga. La mayoría de los lavavajillas utilizan la misma cantidad de agua y energía tanto si funcionan llenos como medio llenos. En general, a un hogar medio le cuesta unos 50 euros al año hacer funcionar un modelo anterior al año 2000. Utilizar el lavavajillas sólo cuando está lleno puede reducir los costes de funcionamiento en un tercio o la mitad, lo que supone un ahorro de hasta 30 euros al año.
- Los modelos más nuevos ahorran energía. Los lavavajillas de bajo consumo de agua utilizan menos agua y menos energía para calentar el agua que los modelos estándar.
- Utiliza el ciclo adecuado. Utiliza el ciclo de lavado más corto para el tamaño de tu carga. Utiliza el ciclo de secado sin calor.
- Ajuste la temperatura adecuada. La temperatura del agua no debe superar los 50 ºC.